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sábado, 10 de febrero de 2024

Con agricultores y ganaderos, siempre.

Viñeta de "El rincón de Miguel", en La Opinión de Zamora. 
Yo añado: Con agricultores y ganaderos, siempre.

Hoy he desayunado buen pan,

agricultor, te lo agradezco;

y también un tazón de leche,

lo mismo digo, ganadero.

 

Sois gente currante, sencilla,

gracias a vosotros comemos,

hasta los vagos que os critican

no pueden vivir sin lo vuestro.

 

Lucháis contra calamidades,

hierbas y plagas… ¡contra el tiempo!,

aunque vuestro peor enemigo

está dentro de los gobiernos.

 

Son insaciables burócratas,

políticos de postureo,

que corren pidiendo tus votos

y si te he visto, no me acuerdo.

 

Y en los despachos holgazanes,

que confunden castaña y huevo;

por educación no les digo

dónde metan el papeleo.

 

¿Quién se burla de vuestro sudor?,

¿quién se queda vuestro dinero?;

quien muerde al que le da de comer,

dice el refrán, no es más que un perro.

  

Hoy el campo pide justicia,

guarda la porra, majadero;

si eres capaz de pensar, piensa

que luego irás a plato puesto.

 

Adelante, que ya es hora;

han removido el avispero.

Toca sulfatar otra plaga,

gente del campo, mis respetos.

 

Posdata: ahora os llaman fachas

a los que arriesgáis el pellejo:

si facha entienden trabajador,

otro facha firma estos versos.

 

--------ETJ--------

 

domingo, 31 de diciembre de 2023

¿Buscas valientes? Mira:


Si buscas valientes, mira,

en mi valle hay por cientos;

tienes mucho donde escoger,

hay mayores y pequeños.

 

Porque hay quien vino por agua

para quitársela al pueblo,

y aquí se viene a compartir,

bebe, y deja para el resto.

 

Puedes traerte un botijo,

o cien, en tu maletero;

llena y recuerda la fuente,

como dijo el sabio maestro.

 

Pero no nos traigas vallas,

con candados, no queremos;

lo de todos es de todos,

quédate con tu dinero.

 

Resistencia día y noche,

contra viento o bajo cero,

contra esa burocracia

carente de sentimientos.

 

Frente a la mentira valor,

fortaleza a cada intento;

una lección de coraje

se ha escrito en su campamento.

 

Hoy acaba una etapa,

sé que volverán a hacerlo;

si buscas valientes, mira,

un León sigue despierto.


----------ETJ----------



domingo, 17 de diciembre de 2023

Peña... y Almena.

 

PARA AGRANDAR LAS FOTOS CLICAR ENCIMA.

El paraje conocido como Peña de San Mamés aparece en los mapas como Peña de Abajo. Los pinos plantados “a zadón” han mantenido unos importantes restos arqueológicos intactos hasta casi nuestros días. Anteriormente, hasta el principio de era y un poco más allá, el acarreo de piedra como material de construcción ya hizo su daño, por otra parte, entendible. El resto fueron labores de caza y pastoreo, con nula huella en el terreno.

 

En estos últimos dos mil y pico años hasta el incendio del 2021, la única maquinaria pesada que hizo trabajos en la Peña fue el bulldozer de los cortafuegos. Como cortafuegos no sirvieron de nada, visto el resultado, pero como pistas para moverse por el pinar siempre fueron de ayuda. Tras el incendio las procesadoras de madera cortaron los pinos quemados en un abrir y cerrar de ojos, una gestión que desde el punto de vista arqueológico debería haberse hecho de otra forma bien distinta. Los responsables lo llevarán en su conciencia.

 

Lugar Sagrado.

Perímetro y detalles.

La Peña de San Mamés es un escenario de guerra. Es el asalto y reducción a cenizas de un pequeño castro indígena, del pueblo ástur y de la tribu Superati. Una lucha encarnizada y a muerte, no nos quepa duda, cuyos vencidos pasaron a ser esclavos de Roma. Don Augusto Quintana Prieto, archivero y escritor, puso nombre al castro prerromano sin conocerlo, traduciendo del latín la palabra “farum” como Lugar Sagrado, al aparecer porque figura como deslinde en un documento real de 1154. Una serie de circunstancias han ido descubriendo poco a poco, siempre por aficionados a la arqueología, un recinto que hace mucho tiempo debería estar inventariado y protegido. Un dolmen, unos restos circulares de viviendas, o un tótem fueron suficientes razones para en la edad media reconocer el lugar como “farum” (Estamos ante un error de copia: es “fanum”, con “n”, no con “r” y significa lugar consagrado o templo en mi diccionario de latín), pero no parecen suficientes para respetarlo en la actualidad como punto de mínimo interés.

 

Bien analizado, el topónimo Peña ya podría indicar el verdadero uso de la parte más elevada del monte. Peña en el diccionario de la RAE significa, en su primera y segunda acepción, “piedra grande sin labrar, según la produce la naturaleza”, o “monte o cerro peñascoso”, respectivamente. La descripción no puede estar más acertada; si algo corona el monte en cuestión son peñas, plena naturaleza. Pero la etimología de “peña” parece indicar otra cosa bien distinta; es una palabra que viene del latín “penna” o “pinna” (las dos formas existen), y significan “pluma o ala”, y también “almena”, nada que ver con la geología. Estos significados tan dispares se han empleado por comparación con las partes más salientes de los edificios; todavía hoy al voladizo de la parte inferior de un tejado, que sirve para desviar de la pared las aguas llovedizas, se denomina “alero”, de “ala”, y en una fortificación, por el parecido a las cumbres de peñas, se denomina “almena” a los prismas que coronan un muro o parapeto a intervalos regulares.

 

Almena.


Perímetro.

Almena viene del latín mina – minae (partes salientes, amenazas), y de ahí derivan eminente o prominente (alto, elevado, que sobresale), mentón (barbilla, parte saliente de la barbilla), y monte (por sobresalir del nivel del terreno). En la naturaleza, como hemos visto, a los salientes rocosos del terreno se pueden llamar peñas, y por comparación, también almenas.



Almena a vista de dron. (Gabi).

Perímetro.
   

A la parte más elevada de la Peña de Abajo, o Peña de San Mamés, podemos llamarle Almena por dos motivos, el primero por lo expuesto, y el segundo porque en cierto modo es una almena, un nuevo recinto con su parapeto rudimentario, pero que cumplía con su objetivo vigilante y defensivo. El incendio del verano de 2021 nos ha dejado a la vista este segundo recinto prerromano. Aparte de muralla para impedir el paso, también es el lugar idóneo para vigilar el valle, ya que desde el Lugar Sagrado queda totalmente fuera de la vista. Por otra parte, también hacía frente y corte a un vetusto camino, que conectaba el castro con los recursos que proporciona el valle, en especial el agua potable de la fuente que se recuperó higienizándola para consumo humano, y dotándola de bebederos para los animales a mediados del siglo pasado, la fuente de San Mamés. Este camino no pasó desapercibido para los estrategas romanos, por ser idóneo para iniciar la conquista y por eso en frente situaron su campamento.


Campamento romano "el Castrillo". Visto desde la Peña.

El Castrillo en el vuelo americano de 1945-46.


Subida a la Peña y detalles.

En los mapas cenitales de Google Maps, en herramientas como el SIGPAC para móviles y en el Google Earth todavía hay pinos, es muy difícil medir superficies o distancias. El Instituto Geográfico Nacional va también retrasado y tampoco podemos usar el LIDAR; que nos daría, con una precisión increíble, la trayectoria de las murallas. Menos mal que el Visor SIGPAC se ha actualizado muy recientemente, y a pesar de la pobre definición he podido calcular entre 8.000 y 8.500 m2 para el Lugar Sagrado, y poco más de 5.000 m2 para la Almena. 


Superficie aproximada Lugar Sagrado: 8.000 m2. (SIGPAC)

Superficie aproximada  Almena: 5.000 m2. (SIGPAC)

Una vez localizado el contorno de los recintos, tenemos la suerte de contar con un avanzado piloto de drones, que nos deja unas fotos espectaculares, en las que se puede apreciar los amontonamientos de piedras, que en su día fueron una tosca muralla. Muchas gracias, Gabi, por tu paciencia y por el montón de veces que te he hecho subir a las peñas. Que la historia nos lo pague.


Gabi y su dron.


Posdata: las murallas de gran parte de los castros del noroeste peninsular tenían una altura entre un metro y metro y medio, no más; lo suficiente para que los defensores escondieran el cuerpo y utilizaran por encima las armas: flechas, piedras, lanzas, etc. Eran parapetos, que etimológicamente significan “proteger el pecho”. Estas estructuras no guardaban líneas rectas ni estaban aplomadas, recordemos que los ástures no labraban la piedra ni tenían conocimientos constructivos. Por si alguien se imagina la muralla de Astorga, la de León, o la de Zamora en la Peña de San Mamés, va a ser que no; pero pocas murallas tan insignificantes opusieron tanta resistencia a uno de los ejércitos más poderosos de la historia.




Mapa de la zona

Detalles: para agrandar clicar encima.

Vivienda de planta circular.

Detalle muralla oeste.

Muralla de la Almena.

Almena a vista de dron. (Gabi).

Detalles de Lugar Sagrado.

Lugar Sagrado desde el oeste. Dron. (Gabi).

Muralla oeste de la Almena.

Muralla oeste a vista de dron. (Gabi).


sábado, 9 de diciembre de 2023

Agua, va por tí.

Agua, va por tí:

 Me encanta la radio. Siempre está trabajando a mi lado. Hace incluso más horas que yo; porque muchos días queda funcionando mientras voy a comer, o cuando lo dejo por la tarde, y se pasa la noche dale que te pego, a su rollo.

 

El pasado martes, 5 de diciembre, me contaron que el señor alcalde de Castrocalbón tendría una entrevista en la radio Europa FM de La Bañeza, en el 107.7. Me costó sintonizarla, pero como me preocupa tanto el tema, intenté estar atento y tomar notas, para ahora comentar en este blog las impresiones. Al fin y al cabo, es mi valle, y es mi gente la enfrentada por el agua, y me duele. ¡Cómo no me va a doler!

 

Molino del aceite.

Nada más arrancar, el entrevistador señor Matías, “Mati” para el señor concejal acompañante, en su primera pregunta mete dedo, mano y antebrazo a hurgar en la herida:

-¿Ha helado mucho por Castrocalbón esta mañana, esta noche?

-Pues más que ayer - le contesta correctamente el alcalde.

-Jajaja, si si, ha sido gorda la helada de esta noche, sin duda -continúa en tono jocoso-. Eh… me acordaba yo de los que están haciendo guardia allí, en el pozo y digo ¡madre mía!, cómo se estarán, cómo se estarán poniendo. (Literal, manda cojones)

Vamos a ver: si a alguien le hace gracia que gente de todas edades y condiciones pase frío, calamidades y burlas por defender lo que creen justo, demuestra una falta total de respeto y sobre todo de empatía. Y la empatía retrata a la gente desde lo más hondo de su ser, porque no entiende de sexo, piel, credo, dinero o poder y contribuye a crear sociedades justas, compasivas y pacíficas; en definitiva, humanidad. Hacer semejante comentario de barra de bar pasado de copas, y además en la radio, me parece como poco una temeridad; es calentar más los ánimos, sin necesidad ni beneficio, además por parte de un comunicador que presuponemos como neutral. Matías, te has “pasao”. Mal empezamos.

 

En San Félix.

Al señor alcalde le recordaría que ese grupo discrepante no es precisamente una minoría, como también repite el concejal. Que en un municipio de 900 personas hayan recogido casi 650 firmas en papel, y casi 900 en internet, creo que es un dato a tener en cuenta; y, sobre todo, que son alcalde y concejal también de la inmensa mayoría de los firmantes, aunque por la férrea defensa más bien parecen los gerentes de la embotelladora. Por tanto, quizás también algo de empatía no haría daño a la convivencia, y más que mentar a la Guardia Civil, y a los tribunales está el, cuanto menos, ponerse de perfil. Porque si es verdad, como dicen ustedes, que el ayuntamiento no puede hacer nada, lo disimulan muy mal. Recordemos el refrán: pueblo pequeño, infierno grande. ¿En eso queremos convertir la baja Valdería?

 

Por cierto, a causa de mi innato despiste aún no he firmado. ¿Queda sitio todavía?

En Calzada.

 En toda la entrevista no hacen más que argumentar la creación de puestos de trabajo. Y claro, oponerse queda feo, ¿verdad?. Por esa regla de tres, demos luz verde a las empresas madereras para que talen árboles de forma indiscriminada, ya que crean miles de empleos. O quitemos controles a empresas contaminantes, será por trabajadores directos e indirectos. Y vía libre a las macrogranjas, a los vertederos, a las minas, al co2 a escape libre… que la gente haga lo que le dé la gana contra la naturaleza y que viva la pepa. Claro que queremos trabajo, pero ¿a qué precio?

 

Para defender la embotelladora, esgrimen estudios de ingenieros de minas. No seré yo, cuitao de mí, que de la EGB sólo aprobé la E y la G, quien contradiga al señor ingeniero. Si él dice que el agua no se acaba, palabra de Dios. Lo que sí me gustaría recordar al ingeniero y a los señores gerentes de la entrevista, es la memoria popular. Al lado de la bimilenaria calzada (que todavía en esta entrevista sigue negando que esté reconocida e inventariada, a pesar de estar señalada por el propio ayuntamiento) estaba la fuente del Robleo (Robledo para los finos). Se secó, y los de más edad recuerdan el motivo: exactamente cuando empezaron a prospectar pozos artesianos en el valle. Entre Felechares y Pobladura había uno de esos pozos, que curiosamente dejó de echar agua cuando el pozo de la cuesta rompió a manar como un imparable volcán, es verdad, hace 43 años. Cierto vendedor ambulante que siempre comía en ese pozo tuvo que empezar a llevar agua para pasar mejor el bocadillo, y todavía hoy puede dar testimonio. Han hecho otros pozos por encima de Felechares, que no solo se secan en verano cuando más abajo abren para regar, es que el agua baja por debajo de los 10 metros del nivel del suelo. Claro que el pozo de la cuesta no se va a secar, como asegura el alcalde. Todos sabemos que no; por el principio de vasos comunicantes, el pozo de menor nivel es el último en secarse. El pozo de abastecimiento de Felechares ya necesita bomba, el siguiente en caer será seguramente el de San Félix, y así sucesivamente mientras va bajando el nivel de la capa freática. Con estos argumentos y testimonios no quiero decir que una embotelladora no tuviera suficiente caudal para su objetivo, pero ante la duda tan lícito es defender una postura como la contraria, ¿o no, señores gerentes?


Placa municipal de calle: Vía romana, calzada.

 

Por cierto, señor alcalde: ya que tanta relación tiene últimamente con la Confederación Hidrográfica del Duero, y con los ingenieros de minas, podría comentarles que el río Éria está amenazando peligrosamente a Calzada. Ya se ha comido el caño, y con otra gran riada cruzará el Sagral derecho al pueblo, por donde antaño iba al menos un ramal. ¿O es que al río ni tocarlo, pero todo vale cuando el agua da pasta?

 

Los pozos “surgentes” han sido, son y serán motivo de discordia en el hermano valle Vidriales. Tristemente, ha faltado el canto de un duro para las hostias en varias ocasiones, porque se roban el agua unos a otros. Unos episodios nada recomendables para nuestros pequeños pueblos, que nos llevan a los vecinos a parecer pocos y mal avenidos. Por cierto, acabo de escribir a la RAE para que incluyan en el diccionario lo de pozos “surgentes”, que han inventado el alcalde y sus “ingenieros” para contradecir a los acampados… insurgentes. Antes en geología se decía pozos “artesianos”; habrá que modernizarse. Y también congratularse; algo bueno ya ha salido de este embrollo: habemus nueva palabra.

 

"Pa", si señor, sin complejos.

En algo estoy de acuerdo con el alcalde: el tema es político. Sólo que confundimos lo que es la política (la actividad de quienes rigen o aspiran a regir los asuntos públicos), con el ataque desde el poder al discrepante, porque algunos se han creído "dueños de..." en vez de "servidores de...", Es política, porque estamos hablando de un asunto público, nada más. Y como asunto público la gente afectada tiene pleno derecho a expresar su opinión y a pedir una distinta gestión. Y eso de acusar radiofónicamente a la oposición déjelo para los plenos del ayuntamiento, que es el único lugar de debate y donde se pueden y deben defender. Y claro que estamos de acuerdo en que no hay que llegar a destrozar bienes públicos o privados; estoy seguro que incluso los autores de los daños a la valla también lo están. Pero es que sobra leña en este enorme incendio; a lo mejor otro dirigente en vez de sacar pecho se dedicaría a apaciguar, a buscar salidas, a usar esa mano izquierda que tanto se nos queda dormida. Le recuerdo que las guerras sólo se paran desde arriba hacia abajo, ¿Usted en qué posición está?

 

Creo que necesitamos una tregua, y la necesitamos para antes de ayer. En este Belén al final nos va a salir el niño Jesús sietemesino. A lo mejor hay que hacer como yo, poner la radio (en otra emisora, que no esté Matías), que cante lo que quiera, y todos irnos a comer, y a dormir. Nos lo pide el cuerpo, y nos lo pide el sentido común.

 

¿Podemos tener la Navidad en paz?

 

Pozo artesiano en Felechares, para riego de la vega de la Encina.
En invierno goza de este espectacular caudal,
en verano, cuando se le necesita, queda totalmente seco.
 

lunes, 4 de diciembre de 2023

El agua, en libertad.

Y queremos que así siga siendo. (Pozo en San Felix)

 

Siempre he escogido los versos

cuando algo quería contar;

hoy comienzo con tristeza,

porque lo que mal empieza…

puede tener mal acabar.

 

Mi Valdería adolece

de una penosa enfermedad;

ha perdido su entereza,

quien debe de unir enreda,

y así no es forma de actuar.

 

La gente está dividida

por un profundo manantial:

y lo digo con certeza;

ha llegado por sorpresa

que quieren vender su caudal.

 

Unos ven allí un negocio,

otros, recurso natural

y ya ofrecen resistencia:

¿Quién permite o quien ordena

sin título de propiedad?

 

En estos días de invierno

muchos han cambiado de hogar

por el amor a su tierra,

y su cama por estrellas,

para hacer del pozo un altar.

 

Han plantado un campamento

y allá van todos a velar;

formarán una cadena,

y estorbarán al que venga,

que el agua de aquí no se va.

 

Generaciones futuras:

este valle os quiere dejar,

con respeto y conciencia

por nuestra naturaleza,

su tesoro… en libertad.

 

----------ETJ----------


jueves, 30 de noviembre de 2023

La batalla del agua.

 


Hoy en la Valdería hemos tenido un día desapacible, como dicen los finos; nosotros decimos invernizo: nieblas y lluvias constantes, o día de invierno.

 

Pero hay un buen grupo de gente que se ha desplazado a algunos kilómetros de casa para soportar el agua del cielo, todo el día, y toda la noche, por miedo a perder el agua del subsuelo. Lo de buen grupo no lo digo por grande, que también, sino por gente buena, de todas las edades, y fieles a sus principios. El agua, dicen, no se vende, se defiende. Qué mayor defensa que plantar cara y campamento en medio de ningún sitio, para que los de arriba se enteren que no todo vale, que el límite hay que marcarlo antes de que sea demasiado tarde. Esto, que parece tan alarmista, no es más que el principio de la conservación, si es que aspiramos a dejar algún legado a generaciones futuras.

 

La codicia, esa enfermedad similar a la estupidez, en cuanto que es más peligroso tratar con codiciosos y estúpidos que con malvados, está emponzoñando el tranquilo valle del Éria. Un pozo artesiano, de proporciones considerables, pretende extraer ingentes cantidades de agua para comercializar. El agua de todos, pasaría a ser privada. Y los acuíferos, sin duda, sufrirían las consecuencias. Por si alguien se cree que ese bien natural es inacabable, le sugiero un pequeño viaje a Vidriales, donde se está rozando el nivel crítico, y abrir la llave de un pozo un poco más significa secar media docena, entre ellos las fuentes públicas. Y todo con la venia de las administraciones, esas que machacan con la concienciación del medio ambiente, y a la vez permiten esquilmar los recursos naturales.

 

Menos mal que fue Mahatma Gandhi, sin riesgo a parecer radical, quien dijo que “cuando una ley es injusta, lo correcto es desobedecer”. También dejó dicho que “lo más atroz de las cosas malas de la gente mala, es el silencio de la gente buena”. Por tanto, la resistencia no sé si será legal, pero es perfectamente legítima y necesaria.

 

Hoy he hecho una escapada a mi querido valle, sólo para decirles que ni un paso atrás. La España vaciada no es la España dormida, aunque les pese; y aquí están, y estarán, soportando las inclemencias atmosféricas y personales que hagan falta. Una buena lumbre, acompañando a su propio calor humano, son el centro de la resistencia. Esta batalla pacífica, valga la contradicción, nos representa a todos los que nos oponemos a quienes solo les preocupa su ego y bolsillo. Una lucha constante y bien condimentada, como los buenos cocidos; ya queda menos para saborear la victoria.

 

Mis respetos, valderienses; no me puedo sentir más orgulloso de mis paisanos.





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jueves, 27 de julio de 2023

La Corona: ¿Dolmen?

 

Congosta de Vidriales.

La Congostura.

La toponimia es en muchísimos casos el único documento, además escrito, que acompaña a la historia. Mientras ésta puede caer en el olvido, la toponimia nos encamina de nuevo a lo que los antiguos conocían muy bien, y nombraron correctamente.

 

Así, hay una serie de palabras clave que hacen saltar las alarmas de la arqueología. Como ejemplos próximos tenemos a “la Cerca” (del latín cercare, rodear), donde en el siglo XIX (Saavedra, 1914, 103) se identifican las ruinas de Petavonium. Otra palabra clave es “Castro”, o “Castrillo” (del latín castrum, fortaleza), como asentamiento humano, tanto indígena como romano. En este caso, el Castrillo de Ayoó necesitaría investigación por un posible campamento romano y una torre circular de vigilancia; del mismo modo que el castro indígena “Lugar Sagrado” lo está pidiendo a gritos. Otro caso es relacionar a los moros con construcciones; aparte de daño, no hicieron nada más por aquí, así que algo de los moros o es leyenda o es romano, o incluso anterior (el Casetón de los Moros, dolmen en el vecino Arrabalde, o el Camino de los Moros, calzada romana en Bercianos de Vidriales). Por no seguir en la larga lista de topónimos, termino con “la Corona”, haciendo referencia a un castro prerromano (ejemplo cercano: la Corona de Manganeses). La corona es un símil entre el aro que ciñe la cabeza en señal de premio, adorno o dignidad (nuestra parte más alta), con formas circulares en lo alto de las montañas, sean naturales o murallas defensivas. Pero también puede ser extensible a otro monumento circular, objeto de este artículo que expondré a continuación.

 

Vidriales es un valle extremadamente abundante en restos arqueológicos. Es incluso una zona cuantiosa en restos protohistóricos (fechados entre los años 3500 y 3000 antes de nuestra era, cuyo origen ha sido establecido por el nacimiento de Jesucristo hace 2023 años, total entre 5000 y 5500 años de antigüedad), lo que indica asentamientos humanos relativamente grandes desde tiempos tan tempranos como el neolítico. Hagamos repaso:

 

En Granucillo de Vidriales se pueden visitar dos dólmenes: el dolmen de San Adrián y el dolmen de las Peñezuelas (este último catalogado como Bien de Interés Cultural). Estos dos monumentos funerarios fueron excavados y catalogados en la década de los años 30 del pasado siglo por el padre agustino César Morán Bardón (1882 – 1951), arqueólogo y etnógrafo especializado en prehistoria y folclore en las provincias de la región leonesa. Sin embargo, el libro “Catálogo Monumental de España, en su apartado de la provincia de Zamora, publicado en 1927 por Manuel Gómez-Moreno Martínez (1870 – 1970) cuenta un tercer dolmen “que hubo más retirado, del que arrancaron todas las piedras”, según le relataron en sus investigaciones los lugareños.

 

Continua el repertorio con el dolmen de Ayoó de Vidriales, erróneamente situado en Valdevidera (Valdevidera es un vallecito al lado de Carracedo, a unos 2 km en línea recta), mal catalogado (como cista) y recientemente, junto con el castro anejo, víctima de maltrato. Parece compartir cronología con los de Granucillo.

 

Tenemos que añadir un túmulo dolménico, Piedra Hincada, en Brime de Urz. Ha sido excavado recientemente, creo recordar a finales del 2018 o principios del 19. Ignoro si se han publicado los resultados de la excavación, financiados en su mayor parte por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional, seguramente no.

 

Esta lista está incompleta sin el hermano valle Valdería, aunque nos adentremos en otra provincia. Los constructores de dólmenes no entendían de otros límites que los que marcara el alcance de su vista, y sus divinos montes tenían dos vertientes. En nuestro caso, el eje es Carpurias, una de las últimas estribaciones de otra deidad en forma de montaña: el Teleno.

 

En Morales del Rey hay un dolmen, El Tesoro, rescatado en 1995 con el hallazgo de un pequeño tesoro romano del siglo IV, dieciocho monedas de bronce. De cómo y por qué se hizo ese enterramiento en semejante lugar nada se sabe. Posiblemente alguien no pudo volver a buscar su “tesoro”.

 

Valle arriba llegamos a Arrabalde, al Casetón de los Moros. Es un dolmen de corredor, que conserva cinco de sus nueve ortostatos originales. A finales de los años 90, dentro del proyecto “Ruta Arqueológica por los Valles de Zamora. Vidriales, Órbigo y Eria”, se restauró y señalizó.

 

Es cierto que estos dos pueblos no pertenecen a la comarca Valdería, pero más cierto es que el río que los riega es el mismo Éria, por tanto, están en el valle del Éria, o lo que es lo mismo, Valdería.

 

Un poco mas arriba, en Felechares, hay una propuesta de Dolmen, escondida en un libro que versa sobre otro tema distinto: El Secreto del Palacio, de Saúl Cenador García. Apuntando un gran parecido con el de Ayoó, Cesáreo Aldonza Turrado, entusiasta y autodidacta historiador de Felechares, sugiere un pequeño conjunto de lajas como nuevo megalito. Habrá que esperar a los expertos y sus excavaciones.

 

Y saliendo de Valdería y haciendo cabecera en Vidriales, en el vallecito sin nombre que algunos llamamos Entrevalles, está Cubo de Benavente. que perteneciendo naturalmente al Tera lo han metido en Valles de Benavente con calzador. Allí hay otro túmulo dolménico, muy conocido por todos como “Peña Ficada”, situado al lado de la antigua Cañada Real que une Astorga y Alcañices. Se excavó a la vez que la Piedra Hincada de Brime, con el mismo resultado: nada se sabe.

 

Y por último mi propuesta para otro dolmen Vidrialés. En Congosta, cerca del borde de la terraza superior que da a la Congostura hay una zona donde los lugareños llaman “la Corona”. Incluso una finca cercana ha tomado ese nombre, el cual no aparece, o no he visto en los planos. Como no podía ser de otra forma (parece que llevamos en los genes la destrucción con maquinaria pesada), unas obras cercanas parecen haber afectado al conjunto, aparentemente sepultado como resultado del movimiento de tierras.

 

Las ortofotos cenitales no muestran ningún detalle, dado el pequeño tamaño del posible monumento funerario. Pero seguro que en un remoto pasado, observando la construcción vertical circular, a nadie se le escapó compararla con una corona, completamente aislada con vistas al valle.

 

Las razones para esta propuesta son muchas, variadas y meditadas. En primer lugar, el comentado topónimo “la Corona” como edificio circular. No menos importante es la reunión de lajas totalmente ajenas al lugar, de entre 0.70 y 0.85 metros de lado; hay que ir relativamente lejos para encontrar ese tipo de cuarcita y transportarlas aquí para algo en concreto. Por cierto, el sitio se presta a este tipo de monumentos, como comenté antes: al borde de una terraza, con increíbles vistas al valle. Otro motivo es que uno de los posibles ortostatos está vertical y enterrado en gran parte, aunque es verdad que el resto está desordenado. Que una laja de semejante tamaño, unos 70 cm, esté hincada solo puede ser de forma natural (descartada), como hito o mojón (descartado también, pues sería más redondo), o como parte es algún tipo de cerramiento o edificio, pues ha sido la mano humana quien ha hecho un agujero y la ha colocado vertical. De haber tenido otras lajas, incluso más grandes, habrá que buscarlas en los callejones de las cuevas (bodegas) cercanas, como fue a la vez costumbre y necesidad; o como se dice ahora, aprovechamiento de los recursos naturales.

 

Por lo expuesto, no me parece nada disparatado que efectivamente estemos ante un posible dolmen. Necesitaremos que las administraciones se movilicen para descartar en tal caso, o señalizar y proteger como manda la ley si el resultado es afirmativo.

 

Habrá que esperar.

 

(Y mucho)








Fotos cenitales gentileza de Gabi. Gracias.