eltijoaquin@hotmail.com - facebook.com/El Ti Joaquin

sábado, 22 de diciembre de 2018

El ajuar del rey.



En una aldea bonita,
provincia Judea, en Belén;
aconteció la gran dicha,
que recordamos otra vez.
Un niño, en hora bendita,
pobrecito viene a nacer;
y los padres escudriñan
del ajuar que puede valer.
Encuentran telas raídas,
paño imposible de coser;
- Ha de hacerse nuevo (explica
María la madre a José),
pronto vendrán las visitas
con regalos que recoger;
busca lana, lino y pita,
lo demás sabremos hacer.
Teje la recién parida
un pijama para su bien;
el portal tiene rendijas
que lo quieren estremecer.
Teje también la mantilla
de hilo blanco como papel;
Jesús la agarra y la tira,
y hace que sonrían los tres.
Trenza José las botitas,
de esparto y un palmo de piel;
hoy le quedan grandes, mira,
pronto las llenarán los pies.
Teje, para la bebida,
un barril bañado con pez;
quien trae palabras de vida
no debiera callar por la sed.
Y para la noche fría
le hace una capa también;
se tendrá que ir algún día…
¡cuándo lo volvemos a ver!

Esta poesía termina
con lo que nunca hay que tejer:
un cruel puñado de espinas
para coronar a éste REY.

---ETJ---








(Belén del Santuario de Nuestra Señora del Campo)

FELIZ NAVIDAD

viernes, 21 de diciembre de 2018

La lápida de Tiberio, en Fuente Encalada.




El valle de Vidriales es una fuente considerable de restos arqueológicos, casi tan importante como el nivel de los vidrialeses en su desconocimiento. La inmensa mayoría apenas sabe (así, por arriba) de algún dólmen, de la calzada, o del campamento romano… y ya. Además, el museo de Santibáñez, o su biblioteca, dan la sensación de que hay mucho menos de lo que aparenta, que como digo, parece ser muy poco.

Y sin embargo (a mi entender) es extensísimo nuestro patrimonio, tanto por piezas como por los lugares donde han ido a parar. Sólo hace falta hurgar un poco en los sitios adecuados para encontrar cantidad y variedad, amén de importancia, lo que demuestra que en ésta zona se han desarrollado importantes escenas protagonizadas por tozudos actores. Mis favoritas, siempre lo digo, son las de comienzos de nuestra era, las de una guerra por la independencia de los ástures contra los invasores romanos.

Fuente Encalada se edificó en un lugar privilegiado para la vida (agua buena y abundante, abrigado de los vientos, con buena tierra…), al contrario que Petavonium, pura estrategia. Por medio de Fuente Encalada discurre la Vía XVII de Antonino, que luego se bifurca para saltar el castro prerromano por ambos extremos, o sea, que el lugar no tuvo que pasar desapercibido y seguramente una pequeña parte de las cannabae que cercaban Petavonium se instalara allí. Esto explicaría una posible necrópolis a juzgar por los epígrafes funerarios encontrados en el pueblo.

Creo haber leído que fue el padre agustino César Morán Bardón (1882-1951), investigador autodidacta centrado en la historia, la  arqueología y el folklore de la región leonesa quien por primera vez documentó tres inscripciones funerarias aparecidas en Fuente Encalada. Posteriormente apareció una cuarta, creo que documentada en primicia por Virgilio Sevillano Carbajal (1890-1975). Ninguna de ellas tiene paradero conocido, ni se conocen las dimensiones, ni el material, solo las trascripciones, que además son de gran importancia porque ayudan a situar al menos tres efectivos militares, sus orígenes y su legión: la Décima Gémina. Las palabras clave son FU-01, FU-02, FU-03 y FU-04, todas datadas en el siglo I de nuestra era, aparecen recopiladas en archivos on-line (3), y paso a recordar:

FU-01: C(aius) · Pelusius · C(aii) · f(ilius) / Po[ll(ia)] · Pollentin(us) hic sit(us) est. Interpretación: Aquí yace Cayo Pelusio, hijo de Cayo, de la tribu Pollia, polentino. Parece ser un militar, aunque no lo diga explícitamente, de procedencia itálica.

FU-02: M(arcus) · Valerius · P(ublii) / f(ilius) · Ani(ensis) · Secundus /3 veter(anus) · h(ic) · s(itus) · e(st). Interpretación: Marco Valerio Segundo, hijo de Publio, de la tribu aniense, veterano, aquí yace enterrado. Según los estudiosos, otro militar de la Legio X; de la gens Valeria, muy activa e influyente en la zona.

FU-03: M(arcus) · Volum/nius · C(aii) · f(ilius) · Anie(nsi) / Crem(ona) · miles /3 leg(ionis) · X · h(ic)· s(itus) · e(st). Interpretación: Marco Volumnio, hijo de Cayo, de la tribu aniense, de Cremona, soldado de la Legio X. Aquí yace enterrado. Esta estela si que es de un militar de la legión acantonada en Petavonium.

FU-04: Sutori / Decora[ti – – ann(orum)] /3 XXXV e[t] / Sutori / Prisc(i) /6 ann(norum) XX / C(aius) Suto(rius) f/dciiio. Interpretación: De Sutorio Decorado, de 35 años y de Sutorio Prisco, de 20 años. Cayo Sutorio… (y un final “f/dciiio” que no parece tener interpretación). Esta inscripción funeraria parece que es de una familia, y no se puede argumentar la relación con la Legio X, simplemente podría formar parte de la necrópolis, y parece distinta de las tres anteriores.

No hace tanto tiempo, en la misma Fuente Encalada, un albañil que desmontaba manualmente el muro de una antigua construcción se encontró un mampuesto blanquecino, aparentemente labrado con un surco perimetral que le llamó la atención. Instintivamente la apartó a un lado, y continuó el derribo. Al finalizar, el grifo descubrió unas letras entre morteros y suciedad. Ilegibles y extrañas para él y su familia, y decidieron guardarla.

Un albañil que me ha querido confiar su secreto para que sólo en parte siga siéndolo; en la otra parte, la de dar a conocer nuestro patrimonio, me ha hecho el honor de permitirme hacer fotos y plantearme el reto de descubrir el significado de la inscripción.

Por lo poco que sé, deduzco que estamos ante un monumento funerario, una estela de principios de era, o sea, tiene una edad cercana a los dos milenios. La pieza está deteriorada en la parte superior izquierda y partida por la mitad, y parece caliza. En el derribo no apareció el resto, aunque recordamos que se hizo manualmente, piedra a piedra. Mide 21 cm de ancho, por 30-32 cm de alto, con un grosor de 10 cm. En la parte de arriba, tiene labrada una moldura que rodea la pieza, sin más detalles. La inscripción dice:

¿I?IBIVNIVS
¿T?IBFILQVI
QVADRATV
(…)OMO

Mi único recurso, para éste tipo de investigación es Internet. Y allí, en http://eda-bea.es/(3) Hispania Epigraphica, un sitio que recopila hallazgos arqueológicos como los cuatro descritos anteriormente, y después de mucho buscar, encontré una auténtica sorpresa. Con el número de registro 8411, hay documentada un ara votiva dedicada a Marte, de paradero y lugar del hallazgo desconocidos, incluida en el libro de Antonio Rodríguez Colmenero, Aquae Flaviae (1) con ésta inscripción:

MAIPATRI
TIBIVNIUS
TIBFILQUIR
QVADRATVS
DOMO ROMA
PRAEFEQVITAL
IIFLAVHISP
(…)

A primera vista ya se ve gran parecido de la estela de Fuente Encalada con las líneas segunda, tercera, cuarta y parte de la quinta del ara documentada. Veamos la reconstrucción del texto propuesta:

MA(RT)I PATRI
TIB(ERIUS) IUNIUS
TIB(ERI)FIL(IUS)QUIR(INA)
QUADRATUS
DOMO ROMA
PRAEF(ECTUS)EQUIT(UM)AL(AE)
II FLAV(IAE)HISP(ANORUM)

Esta ara votiva a Marte resulta de gran ayuda en el esclarecimiento de otra a Diana, muy similar, aparecida en Petavonium, “en el cuadro E 50, a poca profundidad y a escasa distancia de una calle, en el espacio correspondiente al vestíbulo de un edificio que se abría a la misma… se encontró ésta junto con numerosas tejas que, por su disposición, debían corresponder al derrumbe de la cubierta” (Zephyrvs, XLVIII, 1995. 331-345), fruto de las excavaciones realizadas en 1989, en la actualidad en el Museo Provincial de Zamora (2). La inscripción del ara, muy deteriorada en la parte izquierda, dice:

(…)NCTAE
(…)AE-TI IVN
(…)QUIRI
(…)QUADRATVS
(…)O ROMA
(…)

A primera vista, de nuevo, resalta en la cuarta línea “QUADRATVS”, como en la tercera línea de la nueva estela funeraria, o la cuarta del ara dedicada a Marte. ¿Qué tienen en común? En el trabajo “Aras Votivas de Petavonium” (2), muy acertadamente, a mi pobre entender, se hace lectura de ésta forma:

(SA)NCTAE
(DIAN)AE TI(BERIUS)IUN(IUS)
(TIBERI FILIUS)QUIRI(NA)
QUADRATUS
(DOM)O ROMA
(…)

Para que nos entendamos, Tiberius Iunius Quadratus, hijo de Tiberius, de la tribu Quirina, natural de Roma, (y en la parte perdida debería poner “Prefecto del Ala II Flavia”, según consta en la anterior ara votiva) dedica a la diosa Diana esta ara. Prácticamente la misma interpretación para el ara anterior, cambiando Diana por el padre Marte.

Se dice que no hay dos sin tres; y de nuevo en Hispania Epigraphica, con el nº 27634 encontramos una nueva inscripción, ésta vez en Astorga, en una basa de una columna. Parece ser que es una pieza reutilizada, en el original es un ara, sólo que está perdida la dedicación. Las dimensiones son de 27 x 46 x 36,5, y la inscripción dice:

(…)
TI IUNIUS
TI F QUIR
DRAT MO ROM
RAEFEQUIT
IIFH
CR
TUMSLM

Con ésta interpretación:

(…)
TI(BERIUS) IUNIUS
TI(BERI) F(ILIUS) QUIR(INA)
(QUA)DRAT(US DO)MO ROM(A)
(P)RAEF(ECTUS)EQUIT(UM)
(ALAE)IIF(LAVIAE)H(ISPANORUM)
C(IVIUM)R(OMANORUM)
(VO)TUMS(OLVIT)L(IBENS)M(ERITO)

Es una nueva ara, del mismo Tiberius Iunius Quadratus, hijo de Tiberius, de la tribu Quirina, natural de Roma, comandante de caballería del Ala II Flavia Hispana, que de forma voluntaria y debida ofrece un ara a… (en la parte perdida se fue el destinatario del voto).
Y ahora, estudiadas las tres aras anteriores, mi lectura de la nueva estela funeraria de Fuente Encalada, ya que está claro que hablamos de la misma persona, tribu, y rango en el ejército romano:

TIB(ERIUS)IVNIVS
TIB(ERI)FIL(IUS)QVI(RINA)
QVADRATV(S)
(D)OMO

y en la parte perdida debería poner:

ROMA
PRAEFECTUS EQUITUM ALAE
II FLAVIAE HISPANORUM
HIC SITUS EST

Lo que significa en conjunto que: Tiberius Iunius Quadratus, hijo de Tiberius, de la tribu Quirina, natural de Roma, prefecto del Ala II Flavia Hispana, está aquí enterrado.

Me parece una estela funeraria demasiado sencilla, para todo un comandante de caballería del poderoso ejército acantonado en Petavonium; un hombre muy religioso, devoto al menos de Marte y de Diana, que dedicó a sus dioses mucho más grandes ofrendas que la que recibió para si mismo, una pequeña lápida en un lugar olvidado.

SIT TIBI TERRA LEVIS
Que la tierra de Vidriales te haya sido ligera.






Bibliografía:
(1)- Rodríguez Colmenero, A., Aquae Flaviae: I. Fontes epigráficas da Gallaecia meridional interior, Chaves, 1997.

(2)- Aras votivas de Petavonium, R. Martín Valls, M. V. Romero Carnicero, S. Carretero Vaquero.

(3)- Rodríguez Colmenero, A., S. Ferrer Sierra. “Entre Bergidum Flavium y Asturica Augusta: Nuevo hallazgo epigráfico y revisión de otro ya conocido.”

Internet:
(4)- Hispania Epigraphica.


domingo, 2 de diciembre de 2018

El sol de S'Arenella




(En castellano, en catalán debajo de las fotos)

El destino de la última escapada, pequeña en tiempo, enorme en distancia, fue un recóndito pueblo de la esquina más oriental de nuestra península. Está tan al Este, que es uno de los primeros lugares, junto con Portlligat en recibir cada mañana los rayos del sol. Ya me gustaría describir, como quien sabe, a Cadaqués; a mi se me antoja como un lugar diseñado para el asombro de los sentidos. Un pueblo de mar y montaña, donde a la luz le sobra color, al viento pureza, y al mar… ¡hay el mar!... el mar sisea, manda callar. Por eso, a poco observar, se ve a la gente que viene, y se detiene; como si fuera posible contener ese instante, formar eternamente parte de él, y devolverlo de nuevo a la libertad. Aquí las fotos son así, como la pesca sin muerte.

También se ve que la gente practica el sano deporte del paseo contemplativo, mi favorito. Largas caminatas por torcidos y quebrados caminos de ronda, siempre con el mar a los pies, bajo un variable y liviano acantilado. Y cuando no, por medio de pinos y olivos que algún genial creador pintó a brochazos; y cuando no por estrechas y empinadas callejuelas con suelo de rastell, que te obligan a mirar dónde colocas los pies, o a pararte para admirar la nívea arquitectura rebosante de detalles. Y para descansar, la restauración y el ocio como oferta, a manos llenas. Un consejo: el reloj, mejor dejarlo en casa, que ya la naturaleza indica el cuando y el cómo.

Cadaqués cuenta con múltiples playas, que van de pequeñas a minúsculas, y de hermosas a preciosas en grado superlativo. Por casualidad, fruto de uno de aquellos regostados paseos y a fuerza de contemplar las perlas luminosas que rebotan en el mar en dirección al sol, hemos descubierto un “extra”, cuando parecía realmente imposible a tanto encanto.

En el extremo más oriental de Cadaqués hay un lugar que llaman Sol Ixent, sol naciente; yo no lo hubiese nombrado mejor. A la derecha, está la única isla habitada del entorno, S’Arenella, que curiosamente tiene una playa que no está en la isla, sino enfrente. La playa de S’Arenella es minúscula, tanto como tranquila con el pesado viento del norte, y revuelta con viento del sur. Es la orientación que le ha tocado, y la que la ha dotado de un, cuanto menos, extraño fenómeno luminoso, que podría llamarse “el Sol de S’Arenella”, aprovechando además el siseo local.

Sabemos que la superficie del agua se comporta como un espejo, tanto por arriba como por debajo, es la reflexión, que en el caso del mar y el sol es reflexión difusa, ya que el movimiento de las olas no permite la formación de la imagen del sol. También se produce el fenómeno de la refracción, en el que la luz cambia de sentido al atravesar el agua, cambiando también de velocidad. Y habría que añadir un nuevo fenómeno, “el Sol de S’Arenella”, en el que el disco solar, perfecto y en aparente tamaño natural, se refleja lateralmente, como a 90 grados. Un observador, a las 10 y media de la mañana (un poco antes y después también), mirando esa playa con el sol a su izquierda, puede descubrirlo a poca profundidad y en un lugar concreto que conforme pasa el tiempo se desplaza en dirección sur hasta desaparecer. La gracia es que el observador también debe colocarse en un lugar concreto; un movimiento lateral o en la vertical de medio metro es suficiente para perderlo.

Solamente lo he podido observar cuatro días, la obligación siempre es superior a la devoción. Y creo que en las sucesivas visitas el fenómeno pierde duración, lo que indica que es puntual, de tan solo yo diría que 10 días, en el que hay un máximo en torno al 22 de noviembre. La buena noticia es que se debería repetir en enero, sobre el 14 más o menos, comenzando el 9 y terminando el 19.

Repaso éste texto ya de vuelta a casa, donde lo subiré a Internet para ver si en otros lugares ocurriera algo similar; desde luego aquí no lo he visto, y las condiciones de luz, temperatura, humedad, o color de fondo son muy similares en todas las playas. Pero he de volver, más difícil será hacer coincidir viaje con las fechas calculadas simplemente por intuición, y vagos conocimientos de física y astronomía.

Todo esto es una hipótesis, me da pena el decirlo. Nada me gustaría más que investigarlo un par de meses para enseñarlo como lo que es, otra curiosidad de la naturaleza, como diría el poeta, más salsa de la vida, uno de esos pequeñitos detalles como la guinda del pastel que hacen extraordinario lo que parece perfecto. Y mira que pocas cosas podían mejorar Cadaqués…


Playa de S'Arenella, a la izquierda la isla.










La misma imagen anterior, con un m. de desplazamiento lateral.


(En català)

El destí de l'última escapada, petita en temps, enorme en distància, va ser un recòndit poble de la cantonada més oriental de la nostra península. Està tan a l'Est, que és un dels primers llocs, juntament amb Port Lligat a rebre cada matí els raigs del sol. Ja m'agradaria descriure, com qui sap, a Cadaqués; se’m presenta com un lloc dissenyat per la sorpresa dels sentits. Un poble de mar i muntanya, on a la llum li sobra color, al vent puresa, i al mar ... ai la mar! ... el mar xiuxiueja, mana callar. Per això, a poc observar, es veu a la gent que ve, i s'atura; com si fos possible contenir aquest instant, formar eternament part d'ell, i tornar-lo de nou a la llibertat. Aquí les fotos són així, com la pesca sense mort.

També es veu que la gent practica el seu esport del passeig contemplatiu, el meu favorit. Llargues caminades per torts i trencats camins de ronda, sempre amb el mar als peus, sota un variable i lleuger penya-segat. I quan no, per mitjà de pins i oliveres que algun genial creador va pintar a pinzellades; i quan no per estrets i empinats carrerons amb sòl de rastell, que t'obliguen a mirar on col·loques els peus, o a aturar-te per admirar la nívia arquitectura ple de detalls. I per descansar, la restauració i l'oci com a oferta, a mans plenes. Un consell: el rellotge, millor deixar-lo a casa, que ja la naturalesa indica el quan i el com.

Cadaqués compta amb múltiples platges, que van de petites a minúscules, i de belles a precioses en grau superlatiu. Per casualitat, fruit d'un d'aquells desitjats passejos i a força de contemplar les perles lluminoses que reboten al mar en direcció al sol, hem descobert un "extra", quan semblava realment impossible a tant encant.

A l'extrem més oriental de Cadaqués hi ha un lloc que anomenen Sol Ixent, sol naixent; jo no ho hagués nomenat millor. A la dreta, hi ha la única illa habitada de l'entorn, s'Arenella, que curiosament té una platja que no està a l'illa, sinó davant. La platja de s'Arenella és minúscula, tant com tranquil·la amb el pesat vent del nord, i revolta amb vent del sud. És l'orientació que li ha tocat, i la que l'ha dotat d'un, si més no, estrany fenomen lluminós, que podria dir-se "el Sol de s'Arenella", aprofitant a més el xiuxiueig local.

Sabem que la superfície de l'aigua es comporta com un mirall, tant per dalt com per sota, és la reflexió, que en el cas de la mar i el sol és reflexió difusa, ja que el moviment de les ones no permet la formació de la imatge del sol. També es produeix el fenomen de la refracció, en què la llum canvia de sentit en travessar l'aigua, canviant també de velocitat. I caldria afegir un nou fenomen, "el Sol de s'Arenella", en què el disc solar, perfecte i en aparent mida natural, es reflecteix lateralment, com a 90 graus. Un observador, a les 10 i mitja del matí (una mica abans i després també), mirant aquesta platja amb el sol a la seva esquerra, pot descobrir-ho a poca profunditat i en un lloc concret que a mesura que passa el temps es desplaça en direcció sud fins a desaparèixer. La gràcia és que l'observador també s'ha de col·locar en un lloc concret; un moviment lateral o en vertical de mig metre és suficient per perdre-ho.

Només ho he pogut observar quatre dies, l'obligació sempre és superior a la devoció. I crec que en les successives visites el fenomen perd durada, el que indica que és puntual, de tan sols jo diria que 10 dies, en què hi ha un màxim al voltant del 22 de novembre. La bona notícia és que s'hauria de repetir al gener, sobre el 14 més o menys, començant el 9 i acabant el 19.

Repaso aquest text ja de tornada a casa, on ho pujaré a Internet per veure si en altres llocs passés alguna cosa semblant; descomptat aquí no ho he vist, i les condicions de llum, temperatura, humitat, o color de fons són molt similars en totes les platges. Però he de tornar, més difícil serà fer coincidir viatge amb les dates calculades simplement per intuïció, i vagues coneixements de física i astronomia.

Tot això és una hipòtesi, em fa pena el dir-ho. Res m'agradaria més que investigar-ho un parell de mesos per ensenyar com el que és, una altra curiositat de la natura, com diria el poeta, més salsa de la vida, un d'aquests petits detalls com la cirereta del pastís que fan extraordinari el que sembla perfecte. I mira que poques coses podien millorar Cadaqués ...