eltijoaquin@hotmail.com - facebook.com/El Ti Joaquin

domingo, 22 de mayo de 2011

Las cigüeñas de Campo Ferrero






Parece imposible acercarse personalmente a una cigüeña en libertad. Este simpático animalito tan vinculado a los humanos, por su figurativa mediación en la venida al mundo de los niños, nos rehúye a pesar de la protección que tienen entre las gentes de los pueblos, estrecha y diariamente relacionadas con la naturaleza y sus criaturas. En su mayoría agricultores y ganaderos, agradecen de éste enorme pájaro su labor de limpieza de gusanos, ratones e insectos de las parcelas. Curiosamente, sólo a ellos les permite compañía, cuando trabajan la tierra con un tractor. Entonces las cigüeñas llegan a escasos metros de los aperos y se dan un festín, sin mostrar recelo por este antinatural, ruidoso y contaminante monstruo que por otra parte remueve el terreno y le proporciona su comida. Desde allí, el conductor puede admirar la destreza de ésta zancuda ave con el enorme y rojo pico, la belleza de sus abultados ojos negros y la elegancia de su vuelo. Sin detener ni bajar del tractor, pues en caso contrario se ven amenazadas y se van. Asombrosamente se ven más seguras con el ruido y el movimiento que con el inofensivo silencio. Tras picotear la tierra durante un buen rato, levantan majestuosas el vuelo y regresan al nido, donde si los tienen, esperan hambrientos los polluelos. Éstas nuestras, que Medio Ambiente les proporcionó un nido en Campo Ferrero, se vieron desahuciadas por ruina, el exceso de peso dobló el soporte y se cayó al suelo. Un pequeño grupo de improvisados ecologistas en acción, nos desplazamos con herramientas a los pocos días, asesorados por José Ferrero, jubilado guarda forestal, y podamos un roble, con la esperanza de no perder la compañía de las cigüeñas. Fue un sábado por la tarde, después de tomar café en el bar de Pepe, y el domingo al anochecer ya habían tomado posesión de su nueva residencia, para regocijo del grupo y beneficio de todos. Poco antes de escribir éstas líneas, estuve visitando el nido, y observando su actividad. Este año tienen tres crías, bastante desarrolladas, ruidosas y nerviosas, lo que se traduce en excelente estado de salud. Da gusto verlas.



No hay comentarios:

Publicar un comentario