eltijoaquin@hotmail.com - facebook.com/El Ti Joaquin

domingo, 26 de mayo de 2013

Tras la barra del bar... una vida se va. (Fito)







He leído por ahí que España es uno de los países del mundo que cuenta con más bares, y me lo creo; para bajar la media tenemos a Santibañez de Vidriales, que antes de la crisis llegó a 17 (o más, según se mire), uno por menos de 30 habitantes, todo un record. Digo lo de “según” por atenerme a la escueta definición de bar, como local con “barra”, del inglés “barrera”, donde se despacha todo tipo de bebidas, ya que en este pequeño pueblo el mismo propietario abría anexos otros locales con nombre propio, camareros, etc, aumentando la cifra. Pero el bar es mucho más complicado de definir, es un local espiritual, de reunión y tertulia, pensamiento y divulgación, es un “ríete tú de la mejor red social”, donde la música y la literatura acampan y gobiernan bajo la influencia o al amparo de la bebida, en un ambiente que atrapa e incita a volver. Montones de canciones: “clavado en un bar”, de Maná; “visite nuestro bar”, de Hombres G; “el calor del amor en un bar”, de Gabinete Caligari; “tras la barra del bar”, de Platero y tú; “peor para el sol”, de Joaquín Sabina; “quiero beber hasta perder el control”, de Los Secretos… y un largo etcétera me vienen a la cabeza…, y ocurre lo mismo con la literatura,
“Si es o no invención moderna,
vive Dios que no lo sé,
pero delicada fue
la invención de la taberna.
(Baltasar de Alcázar)”
aunque la que más me gusta no tiene autor conocido, fue regalada a las puertas de los servicios o en otro rincón recóndito, como quien coloca su bandera en la invasión personal al lugar que le gusta y desearía volver. El propio camarero te da la bienvenida con arte:
“Beber que tengo buen vino,
de política no hablar,
no armar broncas ni jaleos
y antes de salir, pagar”
“Aviso, beber agua no potable puede matar tu sed”, y no te preocupes, “está bien ser abstemio, pero con moderación”, también “se necesitan clientes, no hace falta experiencia”, y aquí “podemos asegurar que 5 de cada 10 consumiciones son la mitad”
Pero la palma se la lleva la reina de la bebida, la cerveza:
"Cebada, lúpulo y levadura
encontraron el agua más pura y,
tan maravillosa mixtura,
se cocina a alta y baja temperatura.
De cuatro a seis semanas madura y,
sale con tal frescura,
cuerpo y dulzura,
que tomarse una sola es una auténtica locura.
Incline el vaso con mesura,
y sírvase la calidad que año tras año perdura.
No se lo digo con vanidad,
para tomarse una “birra”
no hay momento, ni hay edad."
Por eso “24 horas en un día, 24 cervezas en una caja… ¿coincidencia?”, “la cerveza es necesaria para que la sed merezca la pena”, o la impepinable “sexo y cerveza fría, por lo menos una vez al día”. Con la prohibición de fumar tan discutida e incomprendida, alguien, en defensa de su calidad del aire apuntó irónicamente:
“El humo de su cigarrillo es el residuo de su placer, pero, sin mi consentimiento, usted contamina el aire que respiro, ensucia mi cabello y mi ropa, y destruye mis pulmones. Sucede que yo también tengo mi placer, me gusta tomar cerveza, y el residuo de mi placer es la orina… ¿A usted le gustaría que yo le meara?”
Estando serenos esto no tiene réplica, aunque en estos lugares “algunas veces un hombre inteligente es forzado a quedar borracho para pasar un tiempo con los tontos”, con los que afirman que “el día que lean que el alcohol es malo para la salud, dejarán de leer”, o definen la “realidad” como “una alucinación producida por la falta de alcohol”; entonces aparece aquél que dice “es mejor ser un borracho famoso que un alcohólico anónimo”, y proclama su deseo de mejorar: “¡este año no bebo más!, igual si, pero más no”. Caldeado el ambiente, nada como un buen brindis:
“El que bebe se emborracha,
el que se emborracha duerme,
el que duerme no peca,
el que no peca va al cielo,
y puesto que al cielo vamos…
¡bebamos, bebamos, bebamos!”
Lo de los servicios mejor dejarlo, solo este par de letreros refleja la preocupación del dueño del local por mantenerlos higiénicos:
“Cagar de gusto,
oler da pena,
no seas cabrón
y tira de la cadena”
“Después de la faena
tire de la cadena,
y si no se va la zurruspilla
utilice la escobilla”
Llega la hora de pagar. Se complica la cosa. El camarero dice que “se puede pagar a plazos, tenemos plena confianza en Dios. Los demás pagan al contado”, que “hoy no se fía, mañana si”, repetimos, “aquí no se fía, y el que fía no está”, porque “tenemos un trato con el banco, ellos no despachan alcohol y nosotros no aceptamos cheques”. Después las despedidas: “no hables tanto de ti, ya lo haremos nosotros cuando te vayas”, o “si bebes no conduzcas, se te podría derramar”. Esto es un bar, “abierto 7 días a la semana, y también los fines de semana”, donde
“abrimos cuando venimos,
cerramos cuando nos vamos,
si vienes y no estamos
es que no coincidimos”
Rindo pleitesía a dueños y camareros por su inacabable paciencia, nada sería lo mismo sin sus locales, donde preguntan
“¿Qué tiene un vaso de vino? Vale 0,60 euros y da derecho a: usar palillos, gastar servilletas, ver la televisión, sentarse en una silla, ocupar una mesa, hacer aguas mayores y menores, gastar papel y agua, lavarse las manos con jabón, utilizar el secador, tirar colillas al suelo, jugar a los dados, cartas o dominó, conocer gente y reír o quejarse en voz alta. Y, encima, decir que el dueño gana mucho dinero.”
El reportaje fotográfico que acompaña este artículo es de uno de los bares emblemáticos de Santibáñez, el de Alfonso Ferreras, donde además de las ventajas enumeradas anteriormente se puede jugar a las loterías y apuestas del Estado. Me gusta su decoración, yo diría barroca (en el buen sentido), por el derroche de detalles relacionados con este mundillo de ocio, en el que uno se entibia o refresca, a elección, y las horas vuelan a traición. Me despido con una última frase, para meditar:
“El día en que ha de llegar la paz al mundo, será aquel en que dos contrincantes compartan una cerveza.”
En un bar, por supuesto.
  










 Con permiso de Coca Cola, Benditos Bares.
Siempre geniales, siempre Coca Cola.







3 comentarios:

  1. QUERIDO HERMANO. BUEN TEMA HAS TOCADO. A MISA NO IREMOS , PERO A LOS BARES...... CON DEVOCION. CREO QUE ES EL LUGAR QUE MAS GENTE FRECUENTA. MIRALO COMO QUIERAS. Y YO TE PUEDO ASEGURAR QUE ES UN OFICIO QUE TE TIENE QUE GUSTAR MUUUUCHO. CUANDO LOS DEMAS SE DIVIERTEN , ELLOS SON LOS QUE MAS TRABAJAN.HASTA EL DIA DE AÑO NUEVO HAN DE ESTAR COMO NUEVOS , PORQUE LA PEÑA QUIERE MAS. ES EL SINO DE LOS TRABAJADORES DE LAS BARRAS .
    Y LO QUE NOS TIENEN QUE AGUANTAR!!!! EN FIN.QUE SI NO ENCUENTRAS A ALGUIEN , SEGURO QUE ESTA EN EL BAR.
    UN ABRAZOTE.

    ResponderEliminar
  2. Gracias TiJoaquin. Nos seguimos viendo….en los bares por supuesto. Un abrazo

    ResponderEliminar
  3. La cerveza en los bares

    ResponderEliminar